Aparentemente, cuando uno ve esta foto piensa, mira unos caretos de gorrino perfectos para hacer unos callos a la madrileña. Pues va a ser que no. En realidad se trata de unos pasteles ideales para sorprender en una fiesta de cumpleaños. Solo hay que ponerle un par de velitas en los agujeros del hocico y a celebrarlo.
3 comentarios:
Qué pastelitos más desagradables.
¿Ese es el Congreso?
Salud
Menuda mierda de pastel.
Saludos
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