Una señora se va sin su esposo a un Congreso a Cuba. Cuando llega al hotel de La Habana encuentra en su habitación a un negro de dos metros desnudo con unos atributos que quitan el sentido.
Hacen el amor una y otra vez hasta que amanece... ella le pregunta:
- Mi amor ¿cómo te llamas?"
-No te lo pienso decir porque te reirías –contesta él-.
Y así día tras día durante una larga semana hasta que llega el día de regreso al pueblo, en España.
El "cubanito" la acompaña al aeropuerto. Y una vez más y antes de despedirse le pregunta:
- Por favor, no me dejes ir así, dime cómo te llamas.
- Prométeme que no te vas a reír –le dice- ... Me llamo Nieve.
La señora suelta una gran carcajada...
El cubano le dice:
- Ves como te reíste..."
Y responde la señora:
- No me reído de tu nombre, sino de la cara que va a poner mi marido cuando le diga que estuve una semana en Cuba con 25 centímetros de nieve.
Si es que el tiempo cada día está más loco.
ResponderEliminarjajajajaja... y claro 25cm de nieve incitan a no parar de "esquiar"... jajajaja
ResponderEliminarjejeje, buen chiste y la cara de felicidad que traerá la sra.
ResponderEliminarjoe con la madre naturaleza...
ResponderEliminarjejeje Que contenta iba la señora.
ResponderEliminar